Importancia de la Estadística ante la crisis del COVID-19
En muchas ocasiones, la capacidad profesional de un especialista se pone de manifiesto cuando éste ayuda a resolver problemas emergentes de alta complejidad. La pandemia del COVID-19 ha evidenciado que una situación tan compleja como la que estamos viviendo, requiere no sólo de un excelente equipo y personal de salud; sino también de psicólogos, sociólogos, epidemiólogos, salubristas, trabajadores sociales, economistas, gobernantes, entre otros; y por qué no, de especialistas en estadística. Desde el inicio de esta pandemia, la población, en general, ha seguido con mucha atención las cifras estadísticas: el número de casos nuevos, la cantidad de fallecidos y recuperados, el número de pruebas realizadas, la disponibilidad de camas, etc. Hemos visto con detenimiento las representaciones gráficas. Hemos escuchado hablar tanto de la trazabilidad, el número reproductivo, los factores de riesgo; en fin, tantos informes y métricas en base a modelos matemáticos y estadísticos.
Somos de la opinión que el perfil profesional de un estadístico para analizar el comportamiento y la evolución del COVID-19 es necesario e imprescindible en un equipo multidisciplinario. Si bien, su tarea da soporte científico a las decisiones de corte transversal, para analizar, visualizar y comunicar resultados; también ayuda a modelizar un sin número de variables aleatorias frente a la incertidumbre que rodea al COVID-19, para validar los datos y realizar predicciones confiables.
A nivel mundial, la crisis sanitaria ha posicionado a los datos como “principales protagonistas” de esta pandemia. Repentinamente, las cifras comenzaron a cobrar interés público y todos los focosse concentraron sobre los “informes estadísticos”. Sin embargo, la necesidad de contar con información de calidad es fundamental para producir estadísticas oportunas y fiables. Paralelamente, la implementación súbita de herramientas e infraestructuras tecnológicas para enfrentar la crisis supone serias repercusiones en la generación de estadísticas oficiales en tiempo real. Como bien señala la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), “no siempre los países cuentan con la infraestructura de datos idónea para comparar, proyectar y anticipar”.
Como especialista y amante de la estadística, puedo entender el impacto de la repentina aparición de esta pandemia y la baja credibilidad en las estadísticas oficiales. Evidentemente, es necesario tener datos oportunos para validar modelos, hacer predicciones y tomar decisiones sobre la evolución de la pandemia; no obstante, modelarlos para que se aproximen a la realidad puede tardar años.
A partir de esta reflexión, confío que ahora se tendrá una apreciación diferente del rol “omnipresente” que tiene la ciencia estadística, no solo en el análisis de datos del COVID-9; sino también en otras muchas disciplinas y campos del saber. Algo bueno nos ha reforzado esta pandemia, un poco de cultura estadística y reconocer la presencia de ésta en todo lo que nos rodea.
La autora es Doctora en Estadística y Docente Universitaria.