La argumentación en los géneros académicos: una perspectiva integral
La escritura académica constituye un pilar esencial en la formación universitaria, siendo la argumentación uno de sus elementos centrales. Esta capacidad de expresar ideas de manera coherente, persuasiva y fundamentada no solo es crucial para el desarrollo intelectual de los estudiantes, sino también para su inserción en la comunidad académica.
En este contexto, diversos autores han reflexionado sobre la enseñanza y práctica de la escritura cientÃfico-académica, destacando la importancia de un enfoque basado en los géneros discursivos. Un enfoque centrado en los géneros discursivos permite visibilizar los objetivos retóricos y los patrones discursivos existentes (Innocentini, 2021), lo que contribuye a generar conciencia sobre las convenciones y posibilidades lingüÃsticas en la escritura académica.
Al mismo tiempo, Saneleuterio (2017) señala la relevancia del tratamiento adecuado de la bibliografÃa, resaltando que la correcta citación y referencia bibliográfica son elementos esenciales que respaldan las afirmaciones y enriquecen la calidad de los textos académicos.
Sin embargo, la regulación de la escritura académica y la enseñanza de la argumentación escrita presentan desafÃos actuales en la alfabetización académica (Castelló, 2015). La dificultad de los estudiantes para comprender y producir textos académicos complejos evidencia la necesidad de un enfoque sistemático en la enseñanza de géneros académicos, como lo sugiere Bosio (2018). Este autor aboga por la modelización y explicitación del proceso de escritura, asà como por el entrenamiento estratégico en géneros académicos, como artÃculos de investigación o proyectos de tesis, para mejorar la calidad de la producción escrita en el nivel universitario.Â
En lÃnea, con esta perspectiva, Bañales Faz et al. (2015) destacan la importancia de enseñar a los estudiantes habilidades efectivas de argumentación en sus textos académicos, lo que contribuye significativamente a la mejora de la calidad de la producción escrita en el ámbito universitario. Asimismo, diversos estudios resaltan la influencia de factores contextuales en las trayectorias académicas de los estudiantes, como la presencia de información gráfica adicional, el uso de información, el momento de cursado, la posición valorativa y el tipo de texto logrado (Padilla, 2012).
Es fundamental reconocer que la escritura académica, como práctica social, se ve influenciada por valores, relaciones de poder e identidades especÃficas dentro de una comunidad discursiva determinada. Por lo tanto, garantizar la continuidad de las acciones didácticas requiere de apoyos institucionales a lo largo de las carreras, asà como de la transformación de las representaciones de la escritura en los estudiantes para lograr modificaciones profundas y estables. Algunos hallazgos subrayan la importancia del rol del profesor de escritura en guiar a los estudiantes hacia una argumentación efectiva en géneros académicos, enfatizando la importancia de proporcionar experiencias auténticas de escritura dirigidas a audiencias reales (Johns, 1993).
La retroalimentación entre pares mejora el rendimiento académico (Huisman et al., 2018), al igual que la instrucción estratégica en escritura argumentativa, subrayando la relevancia de esta habilidad en el ámbito académico. Además, la autorregulación, el dominio de estrategias para integrar información de fuentes y el desarrollo de habilidades metacognitivas y de pensamiento crÃtico son elementos relevantes.
La investigación en alfabetización académica ha evolucionado, destacando la importancia de la retroalimentación del profesor en la percepción de los estudiantes sobre este tema. En resumen, la guÃa del profesor y las estrategias de enseñanza son fundamentales para el desarrollo de habilidades de argumentación en los géneros académicos. En el contexto hispánico, la investigación sobre la argumentación en textos académicos ha generado importantes avances teóricos y pedagógicos, acorde a los avances tecnológicos (MartÃnez et al., 2021).
Sin embargo, aún existen desafÃos por abordar, como la evaluación de la efectividad de las estrategias didácticas propuestas y la incorporación de las nuevas tecnologÃas en la enseñanza de la argumentación en español. La investigación es la adaptación de los enfoques teóricos sobre argumentación al contexto hispánico. Si bien existen marcos teóricos internacionales ampliamente reconocidos, como la teorÃa de la argumentación de Toulmin (1958) o la teorÃa de la estructura argumentativa de van Eemeren y Grootendorst (2004), contribuye a contextualizar estas teorÃas y adaptarlas a las particularidades lingüÃsticas y culturales del mundo hispanohablante. Esta contextualización permite una comprensión más profunda de cómo se construyen y evalúan los argumentos en textos académicos en español, asà como la formulación de estrategias pedagógicas efectivas.Â
En términos generales, la argumentación en los géneros académicos no solo constituye un aspecto central en la formación universitaria, sino también un campo de estudio y reflexión en constante evolución. El desarrollo de competencias de escritura efectivas, en el ámbito universitario, requiere de una enseñanza explÃcita de la argumentación escrita, asà como de evaluaciones coherentes con los criterios de los géneros discursivos académicos. Solo a través de intervenciones didácticas sistemáticas y apoyos institucionales adecuados se podrá garantizar la formación integral de los estudiantes y su participación activa en la comunidad académica.
El autor es profesor en la Facultad de Humanidades de la Universidad de PanamáÂ
ReferenciasÂ
Innocentini Hayashi, M. C. P., Masson Maroldi, A., & Massao Hayashi, C. R. (2021). Obituarios académicos y homenajes póstumos: legados cientÃficos para el campo de la CienciometrÃa. Revista General de Información y Documentación, 31(1).
Saneleuterio, E. (2017). A citar se aprende citando: experiencia didáctica en alfabetización académica: One Learns to Quote by Quoting: Didactic Experience in Academic Literacy. Estudios ?ambda. TeorÃa y práctica de la didáctica en lengua y literatura., 2(1), 143-159.
Castelló, M. (2015). La investigación sobre escritura académica en los procesos de enseñanza-aprendizaje en la universidad española. Cultura y educación, 27(3), 465-476.
Bañales Faz, G., Vega López, N. A., Araujo Alvineda, N., Reyna Valladares, A., & RodrÃguez Zamarripa, B. S. (2015). La enseñanza de la argumentación escrita en la universidad: una experiencia de intervención con estudiantes de lingüÃstica aplicada. Revista mexicana de investigación educativa, 20 (66), 879-910.
Padilla, C. (2012). Escritura y argumentación académica: trayectorias estudiantiles, factores docentes y contextuales. Magis: Revista Internacional de Investigación en Educación, 5(10), 31-57
Huisman, B., Admiraal, W., Pilli, O., van de Ven, M., & Saab, N. (2018). Peer assessment in MOOCs: The relationship between peer reviewers’ ability and authors’ essay performance. British Journal of Educational Technology, 49 (1), 101-110.
Johns, A. M. (1993). Written argumentation for real audiences: Suggestions for teacher research and classroom practice. TESOL quarterly, 27(1), 75-90.
MartÃnez, A. J. R. (2021). Competencias digitales docentes y su estado en el contexto virtual. Revista peruana de investigación e innovación educativa, 1(2), e21038-e21038.
Toulmin, S. (1958/2003). The uses of argument (2nded.). Cambridge, UK:CambridgeUniversity Press.
Van Eemeren, F.H. & Grootendorst, R. (2004). A systematic theory of argumentation. The pragma-dialectical approach. Cambridge, United Kingdom: Cambridge University Press