La Dirección General de Planificación y Evaluación Universitaria celebró con entusiasmo el Día de las Madres, un evento lleno de compañerismo y agradecimiento. Durante el acto, se destacó la importancia de las madres como pilares de la familia y la sociedad, además de su rol profesional dentro de la institución.

 

El evento comenzó con palabras de Pablo Montenegro en representación del director general, quien expresó su honor al compartir con las madres presentes. Subrayó su papel como grandes colaboradoras que contribuyen al desarrollo del país, siendo ejemplos de fortaleza y dedicación. “Gracias a ustedes, este país sigue creciendo con grandes ejemplos modernos”, enfatizó.

 

La actividad también contó con una reflexión espiritual, liderada por una Ester de Robles, en su intervención, agradeció a Dios por la vida y por permitirles celebrar juntos. Resaltó la importancia de vivir con propósito, destacando que cada día es una nueva oportunidad para realizar el bien y fortalecer los lazos con los demás.

 

Un brindis marcó uno de los momentos más emotivos, reconociendo el esfuerzo colectivo de quienes hicieron posible el evento. Asimismo, se valoró la labor de los compañeros que, aunque no pudieron asistir, participaron en la organización. Este gesto de gratitud reafirmó la unión entre los miembros de la institución.

 

La jornada cerró con una bendición de los alimentos y un mensaje de esperanza y gratitud. El ambiente de fraternidad dejó claro el compromiso de la dirección con el reconocimiento de las madres, no solo como profesionales, sino como agentes esenciales en la construcción de una sociedad mejor.